LA LIBERTAD DE SER OBJETO, REFLEXIONES SOBRE LA EDUCACIÓN DE GÉNERO
Muchas de nosotras fuimos niñas “rebeldes”, en los años 60, 70 y 80: rechazábamos todo lo que oliera a una feminidad forzada y encorsetada; nos negábamos a asumir las actitudes típicamente “mujeriles” y preferíamos escalar rocas, embarrarnos en el lodo o tumbarnos a leer a la sombra de un árbol. Más tarde, defendimos la igualdad…